Catalpa (Catalpa bignonioides)
Origen: La Catalpa bignonioides es originaria del sudeste de EE. UU.: Alabama, Florida, Georgia, Luisiana y Misisipi.
Tamaño: Tiene unos 15 m de altura en cultivo, pudiendo llegar a los 25-30 m en estado silvestre y su diámetro puede estar comprendido entre 6 y 15 m, según la altura.
Descripción: Árbol caducifolio, frondoso, muy ramificado, y de crecimiento muy rápido. Su tronco es de un tono gris pálido. Suele presentar ranuras y escamas gruesas. Sus hojas de margen entero son muy numerosas, de color verde oscuro mate por el haz y más claras y suaves por el envés, de forma acorazonada y grandes (15-30 x 10-20 cm). Se unen a las ramas mediante peciolos largos. Las flores aparecen en racimos de 15-20 cm de largo en los extremos de los tallos. Sus flores olorosas son de forma acampanada, llegando a los 5-6 cm de largo, blancas con 2 bandas longitudinales amarillas y puntos marrón-purpúreos en la garganta, con 5 lóbulos ondulados, uno de ellos de mayor tamaño. Su fruto tiene forma de vaina de 20 a 45 cm de largo y de 10 a 15 mm de grueso. Las semillas de color gris son aladas, con un penacho de pelos en cada extremo de las alas, lo que les permite esparcirse por el terreno gracias al viento.
Curiosidades: El nombre del género procede de la palabra kutuhlpa, denominación usada por los indios americanos. Es por ello por lo que también es conocida como “el árbol Indio”. Es capaz de resistir el frío (hasta -29º) y la sequedad ambiental, adaptándose muy bien a todo tipo de suelos. Estas cualidades junto con su tolerancia a la contaminación urbana explican su presencia en las calles de muchas ciudades españolas.